Cuando emprendas tu viaje a Ítaca pide que el camino sea largo, lleno de aventuras, lleno de experiencias.
Todo empezó con un paréntesis en nuestras vidas profesionales para emprender nuestro propio camino a Ítaca. Somos pareja y tras dedicarnos varios años al sector de la ingeniería aeronáutica y naval, decidimos iniciar un largo viaje que nos llevó a recorrer medio mundo durante un año cruzando Europa, Rusia y Oceanía.
Para cumplir nuestro sueño, habilitamos una vieja furgoneta Hyundai 4×4 con el objetivo de convertirla en un hogar. Dedicamos cinco meses de duro trabajo a jornada completa hasta conseguir que nuestra Ulises (así la bautizamos) estuviese lista para su mayor desafío. Debíamos acondicionar nuestro vehículo a conciencia y prepararlo para que nos protegiera tanto del calor del desierto australiano como de las frías noches rusas, que nos permitiera pasar desapercibidos por la pequeña Europa y resistiera todos los cambios de terreno que íbamos a pisar. Y mientas Ulises iba tomando forma… nació una idea.
Un nuevo proyecto de vida que fuimos madurando durante los largos días de carretera en los que Ulises nos trasladaba por paisajes llenos de contrastes a los lugares más recónditos y salvajes que nuestras retinas habían contemplado jamás. Aquel viaje nos cambió para siempre. Habíamos llegado a Ítaca. A la vuelta nació Itacamper, tu empresa camper en Madrid.
Hoy nos dedicamos a camperizar furgonetas para clientes que confían en nosotros. En cada diseño buscamos la funcionalidad, la calidad y tu bienestar. Como viajeros y como ingenieros, sabemos lo importante que resulta la fiabilidad en una camperización de furgoneta. Porque cuando el objetivo es disfrutar de cada momento a miles de kilómetros, todo debe ir sobre ruedas.
Itacamper es fruto de:
1. Nuestro conocimiento de la industria e ingeniería.
2. La experiencia de transformar y vivir en nuestra camper viajando alrededor del mundo.
3. El tiempo que dedicamos cada día a camperizar vehículos hasta el último detalle.
El gran Ulises emprendió un largo viaje de vuelta a casa, a Ítaca. Ése era su destino, el que le llevó a vivir grandes y numerosas aventuras. El viaje a Ítaca siempre será la metáfora perfecta del propósito de la vida, de los sueños, de las metas, de todo aquello que nunca dejaremos de perseguir. Todos tenemos una Ítaca que alcanzar. Y nosotros nos hemos propuesto ayudarte a conseguir la tuya sin olvidar la importancia de disfrutar del camino. Porque el viaje siempre será más emocionante que la llegada al destino final.